Después de los estragos que causó la creciente de ríos en comunidades de Patate y Baños, que provocaron la suspensión de actividades deportivas, los operadores turísticos buscan nuevamente atraer a clientes.
“El anterior fin de semana nos vimos bastante afectados por la suspensión de algunas actividades turísticas, pero desde el martes cuando calmaron las lluvias y mejoró el clima de a poco comenzó a mejorar la presencia de visitantes”, manifestó Misael Andrade, operador turístico.
Debido al temporal de días atrás, el Comité de Operaciones Emergentes (COE) cantonal de Baños dispuso la suspensión de actividades como deportes extremos en los ríos donde se practican y la visita a la cascada Pailón del Diablo. Pero estas restricciones se han levantado.
Christian Varela, director del departamento de Turismo del municipio de Baños, aseguró que luego de la revisión del estado de los encañonados y de los ríos hecha por guías profesionales, quienes cuentan incluso con licencias internacionales, se decidió permitir que se realicen con normalidad todas las actividades turísticas.
Según el funcionario, están disponibles el rafting, canoping, canyoning, saltos del puente, las tarabitas, los puentes tibetanos, las caminatas al sitio conocido como Pailón del Diablo.
Comentó que con el proceso eruptivo del volcán Tungurahua por alrededor de veinte años, en Baños hay experiencia para manejar las contingencias naturales.
Para nuevamente atraer el turismo al cantón se preparan una campaña y descuentos. Varela aseguró que se trabaja en la campaña de información “Baños te espera para darte aventura, descanso y diversión”.
Incluso sitios de hospedaje y servicios realizan promociones 10%, 40% y 50% de descuentos, con el objetivo de atraer más a los turistas.
Los operadores turísticos señalan que hay gente que todavía sigue llamando para averiguar si las condiciones climáticas mejoraron en Baños y si las actividades turísticas se desarrollan con normalidad, para emprender el viaje.
Los daños más visibles que dejó el temporal invernal se registraron en el sector de Río Blanco.
El afluente destruyó 4 casas y dejó otras 28 en riesgo en el reasentamiento de Juive Grande. Las autoridades gubernamentales han ofrecido ayuda para esa comunidad