La historia de Harland Sanders es sin duda un claro ejemplo de perseverancia. El Coronel Sanders tenía una receta de pollo en la cual creía fervientemente, así de que a la edad de 40 años decidió iniciar un pequeño restaurante. Sin embargo, unos años más tarde su negocio quebró debido a que la construcción de una supercarretera desvió el tráfico lejos de la ciudad, llevándose todos los clientes que esporádicamente paraban en su restaurante. Después de pagar sus deudas, sus ingresos quedaron reducidos a una pensión de USD 105 dólares mensuales.
A pesar de este amargo suceso, el Coronel Sanders decidió seguir adelante con su sueño y a la edad de 65 años emprendió una nueva aventura. Confiado en la calidad de su receta de pollo y armado de una gran determinación, viajó por todo el país en coche dando a conocer su producto de restaurante en restaurante tratando de cerrar un trato en el que recibiría un centavo por cada pollo vendido.
Luego de recibir respuestas negativas en más de 2 mil restaurantes, Harland Sanders tomó la decisión de no rendirse y fue así que inició Kentucky Fried Chicken (KFC). A la edad de 74 años, KFC ya tenía 600 establecimientos con su producto en los Estados Unidos y Canadá.
Hoy KFC tiene presencia en más de cien países y es la cadena de restaurantes de venta de pollo frito más grande del mundo.