Redacción LONDRES
Inglaterra estrenó este 19 de julio lo que se ha dado en calificar como el primer “Día de la Libertad” frente al coronavirus. Sin embargo, lo hizo con los casos de contagio disparados y con el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, confinado por haber mantenido contacto con su ministro de Sanidad, que dio positivo.
Mientras, en el resto de Europa se mantiene la cautela porque los contagios siguen al alza y la presión en los hospitales aumenta paulatinamente. Esto pese a que el ritmo de vacunación se acelera y ya ha superado a Estados Unidos en la proporción de población con al menos una dosis.
Pese a que en el Reino Unido la comunidad científica ya ha advertido que la medida puede ser prematura, desde este lunes ya no hay límites por ley en el número de personas que pueden juntarse en espacios cerrados o asistir a eventos; mientras que los locales nocturnos pueden abrir sus puertas ya en la medianoche.
Además la utilización de mascarillas se recomendará en algunos lugares, pero no será obligatoria.
Escepticismo de vecinos
Mientras tanto, en la otra orilla del Canal de La Mancha, las cosas pintan diferente. Empezando con Francia, donde el Gobierno aceleró el reforzamiento de las restricciones anticovid con la presentación este lunes de un proyecto de ley que hará necesario el certificado de vacunación para actos corrientes de vida social.
El portavoz del Gobierno, Gabriel Attal, confirmó en una entrevista a la emisora France Info que “se cumplirán los plazos” y que desde este miércoles habrá que presentar el certificado sanitario para ir al cine, al teatro, a un museo o a cualquier evento con más de 50 espectadores.
Además, una vez aprobado el proyecto de ley desde comienzos de agosto se extenderá la exigencia del certificado sanitario al transporte público de largo recorrido, a grandes centros comerciales e incluso a bares y restaurantes.
En Portugal, las restricciones como el toque de queda en los municipios más afectados por la Covid-19 se mantiene. Esto ocurre en medio de una creciente presión sobre los servicios hospitalarios, actualmente en niveles no vistos desde hace cuatro meses.
En Alemania, por su parte, la incidencia de contagios sigue en aumento, leve pero continuado, tras haberse alcanzado el domingo el nivel de 10 casos en siete días por 100.000 habitantes. Las autoridades descartan por ahora la adopción de medidas.
Mientras que la pandemia en España continúa su avance, aunque con menor ritmo de contagios diarios; sin embargo, aumentan los pacientes ingresados tanto en camas regulares de hospital como en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). EFE