Es una pesadilla. Los familiares, entre lágrimas y ruegos, buscan camas en hospitales para sus enfermos, y el personal de salud que aún queda en estos centros batalla por atender en medio de limitaciones. Hay decenas de médicos tratantes y residentes, enfermeras y auxiliares con permiso médico por estar contagiados de COVID-19, por haber estado en contacto con infectados, por ser personas vulnerables, por falta de transporte y hasta por estar de vacaciones.
El panorama es desalentador. El hospital del IESS Teodoro Maldonado Carbo tiene áreas con déficit de personal. “Hacemos lo que podemos, pero falta mucho personal en todos los pisos, cuando se necesita se prestan de otras áreas”, dijo una enfermera de este centro, a cuyos directivos este Diario solicitó una entrevista, pero hasta este viernes no fue confirmada.
Los cuatro médicos tratantes, que son los especialistas en neumología, están con permiso, comentó personal de este departamento, quien sostuvo que hay residentes que han asumido esa labor. Las catorce enfermeras del área están con diferentes permisos, solo tres auxiliares están operativas.
De los seis especialistas en neurología, tres hacen guardias de 24 horas; los otros están con permiso. En Endocrinología se trabaja con dos especialistas, los otros siete tienen permiso, refirió un funcionario.
En UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) intermedio están trabajando con 45 enfermeras, la mitad de su personal regular (90), y con 21 de los 35 auxiliares que atendían antes de la emergencia sanitaria.
En las áreas citadas del hospital del IESS y en otras como Cardio-gastro, Cirugía 1, Oftalmología, Medicina Interna, Quirófano Central, Nefrología, Emergencia tienen una reducción de al menos 150 enfermeras y auxiliares de enfermería. A algunas de las que quedan, confirmaron dos de ellas, les han pedido cambiar su horario de 8 a 24 horas para apoyar.
“Hay una enfermera para 16 pacientes críticos, esto es una lucha ardua, no nos abastecemos”, dijo personal del centro, quien aseguró que en primer piso atienden a personas con virus o con sospecha.
El Departamento de Personal atiende a los trabajadores y desde hace varias semanas está colapsado. A diario se reparten 60 turnos y la mayoría de los trabajadores de esa área recibió permiso por haberse contagiado con el virus o por haber estado en contacto con infectados. Actualmente esta área está cerrada en el edificio principal y la atención se la está dando en el edificio de consulta externa. Ahí, personal de otras áreas atiende a los trabajadores.
Actualmente, según un funcionario, solo se están emitiendo permisos a empleados con vulnerabilidad de dos o más enfermedades coexistentes.
“Mi esposo es médico de un dispensario (del IESS), se infectó en el centro y ahora está hospitalizado. Yo estoy en aislamiento catorce días”, dijo una trabajadora de este hospital.
En UCI del Teodoro Maldonado Carbo, según personal, sí tienen equipos de bioseguridad. Pero en otras áreas hay falta de estos insumos. Esta escasez también se replica en otros hospitales públicos, así lo reveló Liliana Triana, representante del Colegio de Enfermeras del Guayas, quien exige protección para sus colegas.
Para muestra de esta situación están los videos que se han publicado en redes sociales esta semana. Son auxiliares de enfermería de los hospitales Universitario y Francisco de Ycaza Bustamante, en Guayaquil, que reclaman por la falta de estos insumos. Esta misma exigencia la hicieron trabajadores de Emergencia del hospital del IESS, la semana pasada.
“Nos mandan a la guerra sin armas. No tenemos los insumos de protección, en especial las mascarillas N95, insumos de protección descartable, y la vestimenta que nos dan son las batas descartables 1 por cada guardia, no hay desinfectante para el buen lavado de manos… y si llegamos a faltar porque nos sentimos mal, nos empiezan a entregar la carta blanco (despido)”, narró una enfermera del Fco. de Ycaza Bustamante.
No obstante, el vicepresidente Otto Sonnenholzner informó en su cuenta de Twitter que en la bodega del MSP Zona 8 existen suficientes insumos médicos para distribuir a todos los hospitales de Guayas. (I)
Contagiados
El Colegio de Enfermeras del Guayas registra 80 colegas contagiadas con el virus COVID-19 y 5 fallecidas. Además, otras 380 tienenla sintomatología de este virus.
No hay varios reactivos y fármacos en hospital TMC
En el hospital del IESS Teodoro Maldonado Carbo no hay varios reactivos, como el PCR, que sirve para detectar la carga viral que tienen un paciente, desde el 26 de marzo. A pacientes con sospecha de COVID-19 no se les está realizando esta prueba, se pide hacerlas en laboratorios privados. Eso le pasó a Juana, quien gastó $100 en esa y otras siete pruebas.
“Me pidieron hacer 8 exámenes, pero no había 4 (PCR, CPK, Dimero D, LDH)”, dijo.
También hay escasez de antibióticos intravenosos, solo hay dos; de antibióticos en pastilla solo hay uno; no hay paracetamol, solo el intravenoso; no hay pastillas hipertensivas, como losartán. Entre los insumos médicos faltan en algunas áreas equipos para microgoteo para disolver medicación intravenosa, jeringas de 1 c. c. para administrar insulina, jeringas de 20 c. c. para disolver medicinas, entre otras.