Sucre es una parroquia de Patate que posee el centro de interpretación Patati Urco, donde puedes mirar objetos arqueológicos y conocer más sobre la cultura de este hermoso lugar de la provincia.
A casi 3.000 metros sobre el nivel del mar está Sucre (Patate) tierra de cultura y de una importante presencia de objetos arqueológicos, pues desde antes de la conquista Inca este lugar albergaba a la cultura Panzaleo y Puruha.
Aquí para preservar ese legado se levantó un proyecto familiar que tiene como objetivo revitalizar la cultura de la parroquia y ser un espacio para la memoria, su nombre es Patati Urco y es un centro de interpretación dirigido por Eliseo Rojana, de 31 años, un apasionado por la cultura y la naturaleza desde niño.
El Centro de Interpretación Patati Urco es un espacio para viajar en el tiempo, pues cuenta con varias piezas arqueológicas Puruhas, Panzaleo e Incas, además, de varios trajes y máscaras que sirven para explicar a los visitantes sobre los ‘toros’, ‘mochos’, ‘vaqueras’ y más personajes únicos de la fiesta tradicional de esta parroquia.
Historia
Entrar en este lugar resulta toda una experiencia educativa, pues cada espacio y objeto cuenta una historia que muestra todo el tesoro cultural y arqueológico que guarda Sucre, el lugar fue construido por la familia Rojana con la técnica del bareque que es barro, carrizo y otros elementos.
“El museo se creó en base a una minga con la familia, tratamos de hacer una réplica de las antiguas construcciones, incluso tenía techo de paja, pero debido a que no era muy seguro en las lluvias lo cambiamos a teja”, aseguró.
Desde el 2019 este proyecto se viene desarrollando y tuvo algunos contratiempos en la época de pandemia, incluso los vecinos son colaboradores con varias piezas arqueológicas encontradas en el sector durante la construcción de sus casas o mientras araban sus terrenos para la siembra.
“Cuando comienzan a hacer una casa o están en los terrenos las piezas comienzan a aparecer o a veces se hunden las patas de las yuntas mientras estábamos trabajando, son utensilios que fueron utilizados para ceremonias, por ejemplo hay personas que encuentran y me mandan para que no se rompan y mejor los visitantes puedan ver y valorar el patrimonio”, afirmó.
Orquideario
Otra parte importante es el orquideario que se encuentra en el mismo espacio y es una pequeña parte que simula un bosque que es el hábitat de las orquídeas, varias especies son parte de este lugar entre ellas se encuentra una conocida como cara de mono, pues se asemeja a esta, además de otras que florecen cada cierta cantidad de años e incluso una que florece, a través de sus raíces y que requiere un lugar especial para apreciarla.
“Se encuentran en estado natural, les hemos dado un ambiente adecuado, están en los árboles, tratamos de preservarlas y mantenerles vivas, tenemos una que se da solo en los Llanganates”, comentó.